El pasado viernes fue una jornada violenta en Iguala: Seis ejecutados, entre ellos un policía municipal, un soldado muerto al caerse durante una operación y un herido con un disparo en la frente. Cabe señalar que en cinco días ha habido una brutal escalada de la violencia, a pesar de la presencia de la Policía Federal y la Gendarmería, misma que dejó un saldo de 15 muertos y cinco heridos por arma de fuego.
Iguala,GRO.-28/Feb/2015 En sólo dos días, la ola de violencia generada por la disputa entre grupos antagónicos de la delincuencia organizada, dejó 10 ejecutados y la muerte del teniente de infantería del 27 Batallón de Iguala, Bruno Hernández, quien cayó y se golpeó la cabeza durante una operación, confirmaron fuentes policiacas sin dar más detalles.
La jornada violenta dio inicio ayer cerca de las 2:00 horas cuando hombres armados atacaron dos jóvenes en un domicilio de la calle Rueda número 55, en el centro de la ciudad, de los cuales uno murió en el lugar, de dos impactos en el tórax, identificado como Argenis Hernández, de 22 años, vecino de la calle El Huerto, del barrio de San Gerardo en esta ciudad.
Un menor también resultó herido de dos balazos un menor de 15 años, vecino de la colonia Tamarindos de esta ciudad, quien en el trascurso de la mañana murió en el hospital general, donde había sido trasladado para su atención. En la zona del ataque fueron levantados cinco cartuchos percutidos, calibre 9 milímetros.
Los cuerpos fueron trasladados a las instalaciones de Servicio Médico Forense (SEMEFO) de esta ciudad, después de las diligencias practicadas.
Posteriormente a las 7:00 horas se reportó el hallazgo de siete personas ejecutadas en el cauce del río San Juan a unos cuantos metros del puente Zaragoza.
Las tres víctimas presentaban huellas de tortura, tenían las manos atadas en la espalda y los ojos cubiertos con cinta canela y el tiro de gracia. Sin embargo uno de ellos tenía un disparo en la frente y una perforación que le fracturó el cráneo, esa víctima fue encontrada aún con vida y consiente y se identificó como José Salgado Urióstegui, de 40 años de edad, vecino de la colonia Cuauhtémoc de esta ciudad, el cual fue trasladado en ambulancia al hospital general Jorge Soberón Acevedo.
Por su parte las otras dos víctimas estaban hasta la mitad del río y tenían huellas de tortura, estaban degollados y el ya mencionado tiro de gracia.
De manera extraoficial se informó que los cuerpos tenían cartulinas con narco mensajes en contra del gobierno y del grupo “Guerreros Unidos”, dichas cartulinas fueran aseguradas por miembros de la Gendarmería que impidieron todo el tiempo la labor periodística y no revelaron los textos.
Trascendió que una de las víctimas correspondía a una persona de unos 30 años, complexión delgada, tez morena, pelo negro quebrado, vestía pantalón de mezclilla y playera negra. Y el otro, de unos 25 años, de complexión delgada, tez morena, pelo negro lacio, vestía pantalón de mezclilla azul y camisa de manga larga a cuadros blancos y rayas negras.
A su vez, varias horas de que sucedió el ataque, hicieron su aparición los Gendarmes mismos que impidieron el trabajo de reporteros, resguardaron la zona y los cuerpos fueron levantados hasta después de las 11 de la mañana, por el retraso del Ministerio Público y peritos de la fiscalía.
Estos tres cuerpos fueron encontrados cerca de la colonia Ricardo Flores Magón y la colonia 23 de Marzo, donde el lunes y jueves un médico de la Secretaría de Salud y cinco jóvenes fueron atacados en diferentes hechos.
Además a las 13:30 horas un pistolero ejecutó a quemarropa al policía municipal Juan Varela cuando caminaba, vestido de civil, acompañado de su hermano.
Trascendió, de forma extraoficial, que el policía razo había asistido al pase de lista, que realizan en diferentes partes de la ciudad, los agentes que no están activos, pero que aún cobran en la nómina del Ayuntamiento desde que fueron separados de sus funciones y enviados a capacitación al centro de adiestramiento militar en Mazaquiahua, Tlaxcala, tras el ataque y desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, hace cinco meses.
Al cadáver se le apreciaban al menos cuatro disparos; en la cara, el ojo derecho, en el tórax y dos más en el estómago. Además se menciona que su hermano fue detenido, por policías federales, en calidad de testigo.
A su vez los policías federales sólo hicieron bien la labor de acordonar la calle y de intentar que los reporteros sacaran fotos, ya que de ahí en más su labor ha sido paupérrima.
Pasadas las 2 de la tarde llegaron peritos y Ministerio Público a una zona que ya era resguardada por cerca de 40 policías federales que impedían el paso de policías estatales a la zona.
A las 15 horas el cuerpo fue levantado para posteriormente trasladarlo a las instalaciones del SEMEFO.
Cabe señalar que los ataques que han ocurrido a lo largo de la semana han sido adjudicados a “Sierra Unida Revolucionaria” ya que en una de las cartulinas encontradas se lanzó un mensaje contra Guerreros Unidos: “Vamos por todos los Guerreros Unidos, atentamente Sierra Unida Revolucionaria”.
De esta manera la semana ha sido de suma violencia e inseguridad en Guerrero mientras que en la Ciudad de México brindan y se jactan del gran poderío de las fuerzas armadas al capturar a Servando Gómez, la realidad no es eso, la realidad es lo que ocurre ahí afuera, lejos de sus trucos publicitarios buscando calmar al monstruo que los alimenta: Nosotros.
fuente.-Rev.30