- Los secretarios encargados de elaborar los proyectos que discuten y aprueban los ministros del máximo tribunal de justicia del país y los magistrados electorales ni siquiera pudieron pasar la primer etapa del concurso, al no obtener una calificación a 8.5 en el examen escrito.
LA JORNDA 29/Ago/2014 Burlas, molestia, incredulidad y decepción al interior del Poder Judicial de la Federación causaron los resultados del Decimonoveno Concurso Interno de Oposición para la Designación de Jueces de Distrito, en el que más del 96 por ciento de los secretarios de Estudio y Cuenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y de la sala superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) salieron reprobados.
Los secretarios encargados de elaborar los proyectos que discuten y aprueban los ministros del máximo tribunal de justicia del país y los magistrados electorales ni siquiera pudieron pasar la primer etapa del concurso, al no obtener una calificación a 8.5 en el examen escrito.
Sólo el secretario de Acuerdos de la SCJN, Rafael Coello Cetina y Francisco Gorka Migoni Goslinga, secretario de Estudio y Cuenta de la Corte, obtuvieron la calificación aprobatoria de 8.8.
Los otros 51 funcionarios judiciales obtuvieron calificaciones que no corresponden al nivel de responsabilidad y conocimientos que, a juicio del CJF, se necesitan para ser juez de distrito.
Durante muchos años, los secretarios de Estudio y Cuenta se quejaron de que los exámenes de los concursos de oposición internos para designar jueces de distrito, estaban diseñados para que fueron elegidos los secretarios de juzgados y tribunales federales.
Argumentaron que por esa razón, la gran mayoría de quienes resultaban elegidos provenía precisamente de juzgados y tribunales.
Es más, hubo quien decía que el Instituto de la Judicatura Federal (encargado de elaborar las pruebas) elaboraba los exámenes a modo en contra de los funcionarios de la Corte.
Finalmente, el cinco de agosto pasado, el Consejo de la Judicatura Federal escuchó los reclamos de los secretarios de la Corte y resolvió que en el Décimo Noveno Concurso para designar a 25 jueces de competencia mixta participaron únicamente funcionarios de la SCJN.
De última hora, y como una muestra de unión y cortesía al interior del Poder Judicial Federal, los consejeros –presididos por el ministro presidente Juan N. Silva Meza– decidieron incluir a los secretarios proyectistas de la sala superior del TEPJF.
El fracaso fue rotundo y el CJF se vio obligado a declarar desierto el concurso y a convocar a uno nuevo, destinado al mismo sector de funcionarios consultados.
Además, por única vez, los dos secretarios que pasaron la primer etapa, pasarán directamente a la segunda fase, que es la resolución de un caso práctico.
Hay quienes afirman que el resultado es producto de los vicios que arrastra el Poder Judicial de la Federación desde hace años, cuyo ingreso es, en la inmensa mayoría, gracias a la pertenencia a la Familia Judicial.
Y es que, la mayoría de los secretarios de la Corte son designados directamente por los ministros (cada uno tiene a diez en su ponencia), sean de carrera judicial o que provengan de la academia o el litigio privado, sin examen de oposición de por medio.
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